Escribió Mariano Grondona en La Nación que: "el Estado estatista es infinitamente menos eficiente y más corrupto que la iniciativa privada." La desconfianza de Grondona en el "estado empresario" es, en términos relativos al actor privado, infinita. Es decir, un valor mayor que cualquier cantidad asignable. ¿Es realmente así? ¿Tan eficiente y honesto es el sector privado argentino Grondona?
Don't get me wrong. Prefiero al mercado como mecanismo de coordinación antes que al estado aunque creo que las excepciones son muchas. Y muchas veces, en la excepción, alcanza con la regulación antes que con la intervención directa.
Pero, ¿se dan cuenta los lectores que Grondona escribe como un chanta? Chanta en el sentido de sin rigor y sin medida. ¿Se dan cuenta?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario