A veces pasan las palabras: TaM nos advierte que el progresismo se adelanta al peso y que PRO no es PRO-gresismo ni PRO-toperonismo (¿y cuál es la novedad?) sino PRO-facismo. Y no se queda ahí.
Para evitar que un tarareo nos engañe, advierte de los PRO-chantas:
"Son divorciados, escuchan a Serrat y Sabina, también a Silvio Rodríguez; consumen cine difícil y en muchos casos son refinados degustadores del buen Jazz (...) Conozco tanto facho fanático de Charlie Parker, sin ir más lejos, que mejor me callo…"(ya sabíamos que los genocidas podían disfrutar de la buena música y que los PRO podían hasta impostarla pero ¿puede Macri ver cine difícil?... lo dudo mucho).
Finalmente nos desasna: la capital no es progre... votó a FDR, a Erman, a López Murphy.
Se me ocurren dos cosas.
Una, la confusión es mayúscula y los blogs no ayudamos.
Otra, cuando tratás de "monetizar" el blog te pasa esto:
El problema es que es muy difícil que los algoritmos de Google Ads aprendan que "progresismo", bien entendido, sólo puede parearse con "monto" o "perro".
Conozco a tanto intelectual de izquierda que habla en favor de los pobres pero prefiere tenerlos bien lejos...
ResponderBorrarConozco a tanto militante de izquierda que vino de la extrema derecha y a tanto neonazi que viene de la extrema izquierda.
No podemos ser un pais normal con preferencias unimodales?
Lo que hay es esa logica absurda Saramagoesca: "si la izquierda se corre al centro, el centro se corre a la derecha".